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Más Abrazos // Miércoles 20 Mayo, 2020 // #parto, #salud, #maternidad
Si estás aquí es porque ya estás cerca de dar a luz y quieres saberlo todo sobre este momento especial. Por eso, hoy te contamos cuáles son los principales síntomas de parto; de modo que puedas estar preparada y saber qué es lo que le ocurrirá a tu cuerpo.
Recuerda que no es lo mismo hablar de los indicios del «preparto» y el parto en sí. En este artículo abordaremos los principales síntomas de ambos, tanto del trabajo de parto como de los síntomas anteriores a este.
Los síntomas de pródromos o preparto, ocurren hasta horas antes del parto y varían de una mujer a otra. En algunos casos, estos ni siquiera llegan a percibirse. Sin embargo, algo que sucede muy a menudo es que, pueden confundirse con los síntomas de parto debido a que son similares.
También llamadas "contracciones falsas" pueden presentarse a partir de la semana 29 del embarazo, son irregulares, indoloras y su duración es de 30 segundos aproximadamente.
Estas contracciones se dan a partir del incremento de la hormona oxitocina en la sangre, lo cual favorece el incremento de las contracciones uterinas. Sin embargo, estas no deben confundirse con las contracciones del parto, puesto que las contracciones de Braxton Hicks ocurren durante todo el embarazo. No obstante, es en el tercer trimestre en el que se hacen más intensas.
Debes saber que, algunas mujeres la describen como un dolor similar al de la menstruación, dado que este se produce en la parte baja del abdomen y alrededor de las ingles.
La principal diferencia de este tipo de contracciones con las contracciones de parto es que no se dan de forma regular y se pueden aliviar con un cambio de postura, descanso o una ducha de agua caliente.
Una señal verdadera de que el bebé nacerá pronto es la dilatación del cuello uterino, la cual sólo podrá ser detectada por el obstetra o partera por medio del tacto vaginal. Estas contracciones se presentan en intervalos regulares y van disminuyendo la frecuencia entre una contracción y otra, volviéndose cada vez más dolorosas e intensas.
Las contracciones prodrómicas son aquellas que se producen en la zona lumbar e indican el inicio del acomodamiento del cuello uterino. Esta es una de las primeras señales de que tu cuerpo se está preparando para dar a luz.
También debes saber que, la diferencia con los síntomas de parto está en que estos se producen durante la última semana del embarazo y marcan el inicio del preparto, pero no necesariamente del parto.
Finalmente, el inicio del acomodamiento del cuello uterino indica que este ha comenzado a moverse hacia el centro e irá iniciando poco a poco su trabajo para ablandarse y hacerse más pequeño.
Las contracciones de parto suelen empezar a sentirse en la espalda, la zona de los riñones y expande hasta la pelvis y las ingles. Si sientes dolor en la zona abdominal, lo más seguro es que sea una "falsa contracción”. Sentir dolor en el bajo vientre es señal de que el bebé está muy encajado, no obstante, podrían faltar días para su llegada.
Este síntoma no es común a todas las mujeres, pero puede ser uno de los grandes indicadores de que el parto está cerca. Los cambios en el estado de ánimo son comunes durante todo el embarazo. Sin embargo, algunas mujeres manifiestan sentirse más enérgicas durante su última semana de embarazo u horas antes de dar a luz.
Una de las señales de parto en primerizas es precisamente la acidez estomacal o reflujo. Dado el crecimiento del bebé, probablemente durante el último trimestre de tu embarazo estés experimentando incomodidades al ingerir alimentos, dado que tu sistema digestivo ha estado teniendo menos espacio.
Por este motivo, en la última semana, esto tiende a disminuir dado que tu bebé irá buscando acomodarse hacia la parte inferior de tu abdomen.
Ahora que ya sabes cuáles son las principales diferencias entre los síntomas horas antes del parto o de preparto, te contamos cuáles son los que marcan el inicio del trabajo de parto.
¡Uno de los primeros síntomas para dar a luz! A lo largo de la gestación, con el objetivo de evitar el paso de gérmenes desde la vagina hacia el útero, es normal que se acumule una secreción mucoide en el cuello uterino. Mayormente, este es expulsado al final del embarazo unos días antes o durante el trabajo de parto.
Por lo general, mide entre unos 4 o 5 centímetros. Al verlo, podrás notar que tiene una consistencia mucosa con pintas de sangre. Usualmente, este se desprende con los primeros cambios uterinos. No es motivo de alarma, en especial si ya estás con más de 38 semanas de embarazo. Sin embargo, se lo considera uno de los síntomas de parto, en tanto que puede ocurrir durante la labor.
El líquido amniótico es un líquido claro o amarillento que protege al feto durante el embarazo. Cuando la membrana que contiene el líquido amniótico se rompe, este empezará a salir y es posible que sientas un gran flujo o quizás uno pequeño y constante.
Usualmente, ocurre iniciando el trabajo de parto, y, por lo general, el 90% de las veces las mujeres dan a luz en un lapso de 24 horas. Por lo que es un buen signo para prepararse y dirigirte al sitio planeado para el parto.
Las primeras contracciones de parto se sienten como cólicos junto a un ligero dolor a lo largo del abdomen. A veces, viene acompañado de dolor de espalda. Sin embargo, es importante no confundirlos con las contracciones de preparto.
Te aconsejamos tomar papel, lápiz y un reloj para empezar a medir la duración de tus contracciones de principio a fin y la frecuencia con la que se presentan. Si las contracciones duran más de medio minuto y empiezan a ser más frecuentes y más fuertes; entonces, probablemente estás entrando en trabajo de parto.
Si no tienes ninguno de esos síntomas, el método para identificar el momento para llamar a tu médico es calcular el tiempo entre una contracción y otra. Si las contracciones son intensas y regulares, se acorta el tiempo entre una y otra y moviéndote o cambiando de posición no te alivia el dolor, llama a tu obstetra.
El objetivo de las contracciones de parto es dilatar el cérvix hasta en 10 cm y terminar por abrir el paso del bebé hacia el canal de parto. Para ello, la red de fibras musculares que rodean el útero, lo jalan y aprietan hacia la parte superior. Estas fibras llegan a su mínima longitud en el pico de cada contracción; luego se relajan cuando la contracción disminuye, dejando el cérvix cada vez más abierto.
Si te lo preguntas, las contracciones normalmente se sienten como un tensionamiento gradual del abdomen y a menudo las describen como cólicos, pero mucho más fuertes. Conforme estas avanzan, es normal que se te dificulte respirar o moverse hasta que pasen.
La principal recomendación es, prepararse con ejercicios de respiración ayudan a modular el dolor y, sobre todo, a transportar suficiente oxígeno a tu bebé.
Por estos motivos, te recomendamos desde ahora practicar una respiración pausada, siendo consciente de cada inspiración y espiración, manteniendo una posición serena, lo que te permitirá manejar el estrés, ansiedad del parto y el dolor de las contracciones.
Como has podido ver, existen distintos síntomas de parto y de preparto. Por lo que, es importante distinguirlos para saber en qué momento podemos mantenernos en casa y cuándo debemos ir al hospital.
En resumen, los síntomas que te indicarán que el parto ha comenzado son las contracciones derivadas por la dilatación del cuello uterino. El rompimiento de la fuente y la pérdida del tampón mucoso, estas nos avisan que el embarazo está llegando a su fin y que el parto podría comenzar en algunas horas o incluso días.
Finalmente, si eres madre primeriza o ya has tenido uno o más hijos, te aconsejamos prestar atención a estos detalles y, en caso de presentar algún otro síntoma no descrito aquí, consultar con tu ginecólogo para tener un diagnóstico personalizado.
El Dr Eddie Pabón, Hematooncologo pediátra pediatra del Instituto Nacional de Cancerología. Pueden encontrarlo en sus redes Sociales o correo electronico
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El presente artículo fue elaborado en colaboración para Más Abrazos. Este contenido no reemplaza la consulta médica, ante cualquier duda o situación, consulta con tu médico o pediatra de confianza.
La Dra Natalia Albán Aldrioli, Médica pediátra brinda Asesoría en lactancia materna y cuenta con un Diplomado en nutrición infantil. Pueden encontrarla en su redes sociales FB: pediatranatalialban IM: pediatranatalialban
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