Ejercítalo para sus primeros gateos

La mayoría de los bebés empiezan a gatear desplazándose sobre sus manos y rodillas o arrastrándose hacia delante mientras permanecen sentados en el suelo. No debes preocuparte si tu bebé no quiere gatear, hay niños que se saltan la etapa de gateos y van directo a mantenerse en pie para después empezar a andar.

Si tu hijo no quiere gatear toma en cuenta que no necesariamente se debe a un problema físico, puede ser simplemente cuestión de genética o caracter. Observa su desarrollo físico, como peso y altura, así como sus habilidades motrices; si estas se desarrollan normalmente, ten un poco de paciencia. Si notas algo te hace dudar, lo mejor es consultar a tu pediatra, él es el experto para orientarte.

Para ayudarlo a comenzar, puedes estimularlo acostándolo boca abajo sobre la cama. Permite que sus manos y sus pies toquen la superficie, poco a poco comenzará a apoyarse en sus brazos e intentará levantar su cuerpo. Saber que cuenta contigo para sostenerlo le ayudará a ganar confianza, ¡inténtelo!

Todos los bebés son diferentes y desarrollan esta habilidad a su tiempo, pero lo cierto es que una vez que tu bebé aprende dar sus primeros gateos, no hay forma de detenerlo. Por eso te damos algunos tips de seguridad para esta etapa:

• De preferencia, debe aprender a gatear sobre un tapete firme pero acolchado, que además sea antideslizante. Esto lo protegerá en caso de pequeños tropiezos.
• Una vez que aprenden a gatear algunos bebés son muy veloces, lo mejor es colocar rejillas de seguridad en las escaleras.
• Asegura todos los muebles endebles, como mesitas de noche, lámparas de piso, cómodas o libreros pequeños. Tu bebé podría sostenerse en ellos para intentar ponerse en pie.
• Verifica que tu hogar sea seguro para él, agáchate y mira todo desde su perspectiva para asegurarte de que no haya nada con lo que pueda lastimarse.